Comenzar.
Cada día,
con el claro descansando dentro de la inmensidad de su mirada.
Cada día,
con la esperanza despertando de nuestros labios a toda magia.
Comenzar.
En las primeras horas,
desperezando la piel en el dulce ensueño.
Con las primeras gotas,
de una cálida llovizna de deseos.
Construir.
Desde las primeras melodías,
acompañadas de una suave ventisca,
una armoniosa primera estadía,
de sus manos con las mías.
Construir.
Ese tenue brillar,
que ilumina a los más oscuro,
desde adentro y con orgullo,
aquello que llaman: Confiar.
Caminar.
Con un pies tras otro,
mantener nuestro camino,
afrontar al destino,
con toda Integridad.
Conocer.
Explorar esa esencia,
que agiganta su presencia,
y alimenta su Ser.
Contemplar,
La fortaleza en sus sueños,
le esperanza en sus deseos,
Adornando cada despertar,
con mis dulces palabras
que le otorguen Felicidad.
